Sólo el 5% de los españoles admite trabajar sin declarar sus ingresos a la administración tributaria y a la Seguridad Social (ligeramente por encima del 4% de media en la UE), mientras que únicamente el 8% de los encuestados reconoce haber adquirido durante el último año bienes o servicios que implican un trabajo no declarado (frente al 11% de promedio comunitario), según un sondeo del Eurobarómetro publicada este lunes.
Sin embargo, cuando la pregunta es si el encuestado conoce personalmente a alguien que trabaje en negro, el porcentaje aumenta hasta el 33% (32% en el conjunto de la UE). Además, España figura -junto con Grecia, Chipre o Portugal- entre los países donde más ha aumentado (6 puntos) entre 2007 y 2013 el número de personas que declaran conocer a alguien que realiza un trabajo no declarado, algo que el informe atribuye al impacto de la crisis económica y el aumento del paro.
El Eurobarómetro revela también que un 5% de los trabajadores españoles declara haber recibido pagos en efectivo de su empleador (frente al 3% de media en la UE). Los españoles gastan una media anual de 250 euros en bienes o servicios no declarados (200 euros de media comunitaria), mientras que el importe anual medio percibido por los que realizan trabajos no declarados es de 300 euros.
Los bienes o servicios no declarados más solicitados son las reparaciones y renovaciones de viviendas (33%), las reparaciones de automóviles (27%), los servicios de limpieza del hogar (11%) y los alimentos (7%). Los trabajos no declarados que más se realizan son las reparaciones y renovaciones de viviendas (19%), la jardinería (14%), la limpieza (13%) y los servicios de cuidado de niños (12%).
Los Estados miembros con mayor proporción de población que confiesa trabajar en negro son Letonia, Holanda y Estonia (11%), Dinamarca (9%), Lituania (8%), Suecia y Eslovenia (7%). En el extremo contrario se sitúan Malta (1%), Irlanda, Italia, Chipre, Portugal y Alemania (2%). Asimismo, los países con una mayor proporción de encuestados que admiten haber comprado productos o servicios resultado del trabajo no declarado son Grecia (30%), Holanda (29%), Letonia (28%), Malta y Dinamarca (23%).
http://www.rrhhmagazine.com/noticias.asp?id=4541
Esta claro que un grave problema de la economía mundial es las economía sumergida que siempre ha estado pero claro ahora con la crisis se ha incentivado más y causa mucho más daños y lo peor de todo es que si no reeducamos a la población con medidas tanto con reforma tributaria o más inspectores que controlen estas situaciones si se invirtieran más en el control de esto, se podría reducir esta vía de escape que solo crea más paro e incrementa la crisis.
ResponderEliminarEl problema está cuando aquellos que tienen un gran poder económico los cuales pueden soportar los numerosos impuestos del estado no lo llevan a cabo y ellos no se ven afectados como aquellos con menor poder adquisitivo, aunque estos últimos también se dejan dominar por sus empresarios para eludir a hacienda aunque el beneficio mayor es para los empresarios, un ejemplo sería:
Una manera es pagar una parte del sueldo en dinero “B”, esto beneficia más al empresario que al trabajador pues porque el primero se ahorra el pago de parte de las cotizaciones a la Seguridad Social, mientras que el segundo ósea el trabajador paga menos irpf y pierde dinero en los casos de jubilación ,paro baja por enfermedad e indemnización por despido.
Una persona se puede llevar trabajando en el anonimato durante muchos años cobrando su sueldo, parte de él de forma legal y otra en negro ,por tanto , puede combinar el salario mínimo interprofesional con otra cantidad en b.
El problema viene cuando es despedido pues legalmente le corresponde los 45 días por año pero solo lo referido a su cantidad oficial declarada mientras que si, sumamos todos el dinero percibido el legal y el b le hubiera quedado muchísimo más legalmente.
Contra esto habría que luchar para acabar aun su difícil control deberían buscar la manera eficaz para finalizar y poder hacer una economía blanca y limpia.
ENVIADO POR ANA BAÑOS ESTE PRIMER COMENTARIO.
EliminarComentario realizado por Belén Hernández Laserna.
ResponderEliminarHe aquí una de las manifestaciones, me aventuraría a decir, más comunes y mas importantes de la corrupción en nuestro país. No obstante, y es aquí donde considero radica el riesgo, se tratan de actividades “cotidianas” llevadas a cabo por “la clase media” y, en consecuencia, justificadas.
Porque nuestro fin (el ahorrarnos declarar a Hacienda) sí justifica los medios. Entonces, cabe preguntarse, ¿ Qué diferencia, éticamente hablando, hay entre aquel que cobra en negro un “dinerillo” y aquel que aprovechando su posición privilegiada en la Administración Pública persuade e influye a conocidos con la finalidad, también, de ahorrarse un dinero?
La diferencia entre ambos sujetos radica por un lado, en el montante económico en juego y, por otro, en la posición social que tienen. Obviando la primera de las diferencias ( pues la considero de poco interés en el tema ahora a discutir) la segunda de ellas, no obstante, tiene relevancia en cuanto la posición del segundo de ellos, funcionario, político y, por ende, al servicio del interés general, lleva inherente una obligación aun mayor, si cabe, de llevar a cabo conductas legítimas y responsables.
No obstante, y subrayo, siendo consciente de las diferencias entre ambas situaciones, creo que ambos comportamientos son igual de nocivos para este sociedad. Pero ello no lo concibe, o al menos no fácilmente, la sociedad española de nuestro tiempo, la cual, castiga y condena “sin piedad” al político, acusándolo de corrupto y sin valores, pero defiende y justifica al ciudadano medio y ello es debido, me temo, al sentimiento de identificación que subyace.