Lo
que buscan las 19 grandes empresas españolas en su personal
Noticia enviada el 06/03/14 y publicada por Marina
Victoria Núñez Bono
Con la tasa de desempleo juvenil
rondando máximos históricos (un 55% según la última encuesta de la EPA), los
responsables de recursos humanos de las grandes empresas siguen
insistiendo en las dificultades que enfrentan a la hora de cubrir determinados
puestos de trabajo. “Hay perfiles profesionales que
nos cuesta mucho encontrar, aun con el paro actual, y esto no
puede permitirse”, apunta Margarita Álvarez,
secretaria general del Observatorio de
la Innovación Empresarial (OIE), impulsado por Adecco y conformado
por 19 de las más grandes empresas implantadas en España.
Las nuevas exigencias y
tendencias del mercado laboral han obligado a una reinvención de los
trabajadores, a los que se demandan nuevas competencias y actitudes. Unos
requisitos que, según los informes de este neonato lobby, no forman parte del currículo universitario.
“El principal problema es que en la
universidad tienes cero orientación al mundo laboral. El
currículo es tan teórico que se pierde el enfoque profesional, sin preparar a
los estudiantes para entrar en el mundo laboral. Además, es demasiado
generalista, por lo que acaban sus estudios sin conocer el funcionamiento real
de las áreas concretas de una empresa”, lamenta Álvarez.
El denominado ‘candidato de 360 grados’ es el
perfil más buscado, al menos por estas 19 grandes empresas,
entre las que se encuentran Ikea, Coca-Cola, McDonald’s, Seur o Acciona. Se
trata de un trabajador que, según enumera Álvarez, además de contar con
conocimientos específicos en su área de potencial contratación, “maneja
idiomas, conocimientos informáticos, formaciones complementarias y, cada vez
más, competencias transversales”. Estas últimas, añade, no son teóricas y, por
tanto, no se enseñan en las universidades a pesar de la creciente importancia
que les están dando desde los departamentos de selección de personal.
Las actitudes más demandadas y
menos extendidas
“Son competencias
individuales que no sólo valen para la vida profesional, sino también para el
día a día, como es la iniciativa, la adaptabilidad,
la flexibilidad, la capacidad para trabajar en equipo y, sobre todo, para
comunicar”, apunta la secretaria general del OIE. Muchas de
estas habilidades pueden irse desarrollando a medida que se va adquiriendo
experiencia en una empresa, pero hay algunas, como es la comunicación, que se
resisten más. Ya no sólo se trata de hablar en público, sino de “saber
trasmitir puntos de vista y convencer”, una de las materias pendientes de los
trabajadores con experiencia.
Otras de
la carencias más patentes de los trabajadores con experiencia, además de las
falta de habilidades comunicativas, son los idiomas. Si no se manejan uno o dos
idiomas, los parados de larga duración tienen una fuerte desventaja a la
hora de volver a reinsertarse en el mercado laboral, según reconocen desde el
observatorio empresarial. Esto es porque, como apunta Álvarez, las empresas tienden cada vez
más a la internacionalización: aumentan las relaciones con las
centrales ubicadas en otras capitales, laexpatriación de
trabajadores, y hasta las pymes se abren a nuevos mercados en el
exterior, por lo que necesitan trabajadores con conocimiento de otras culturas
e idiomas.
Los primeros análisis del OIE
sobre el sistema educativo diferencian entre módulos de formación profesional, universidades privadas y
públicas. Estas últimas son las peor paradas, tanto por su
enfoque menos profesional como por la carencia en la enseñanza de idiomas. Unas
problemáticas con las que están dispuestos a acabar las empresas participantes
en este observatorio, pues como matizaron durante su puesta en largo: “El
observatorio nace como un espacio no de reflexión, sino de acción sobre los
principales problemas del mercado laboral en España”.
Lejos aún de la ansiada
eficiencia laboral
Crítica con la última reforma
universitaria del denominado Plan Bolonia, cuya filosofía “era buena, pero no
ha tenido ningún efecto ni resultado”, la secretaria general de esta plataforma
aboga por una mayor participación de las empresas en el sistema educativo para
reorientarlo al mundo laboral. Un objetivo, indica, que sería positivo tanto en
términos de responsabilidad social como empresarial. “Si el sistema permite a
los jóvenes orientarse al mundo laboral disminuirá el paro porque las empresas podrán cubrir
huecos y captar talento, además de que los trabajadores serán
eficientes desde el minuto uno sin tener que perder tiempo en formación”.
En definitiva, la actitud
es lo primero en lo que se están fijando hoy en día los responsables de
recursos humanos, según confiesa Álvarez. “Podemos decir que ahora se contratan actitudes,
por lo que se deberían enseñar habilidades”. Entre las que tienen más peso
específico se encuentran las capacidades comunicativas y la iniciativa, “lo
único que te diferenciará del resto”.
http://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2014-02-19/lo-que-buscan-las-19-grandes-empresas-espanolas-en-su-personal_91011/
Noticia enviada el 06/03/14 y publicada por Marina Victoria Núñez Bono
Me ha parecido una noticia interesante y muy próxima a lo visto en este primer bloque.
ResponderEliminarPara comenzar, es de elogiar la preocupación de las empresas por la existencia de un mercado laboral que verdaderamente se ajuste y adecue a sus necesidades y más en concreto, es de agradecer, la construcción del Observatorio de la Innovación Empresarial (OIE) que adopta además una posición activa y no únicamente contemplativa.
Pongo en relación esta noticia con una más reciente en la que se detallaba como ya las empresas no buscaban los mejores expedientes académicos y ponían mayor atención en otros requisitos.
Esto mismo manifiesta Margarita Álvarez, secretaria del OIE. Esto no hace más que confirmar que se está consolidando una nueva concepción de Recursos Humanos mucho más renovada. Lejos queda la consideración que se tenía del personal como otro coste más, en la actualidad y como tuvimos ocasión de ver, se considera al empleado como una fuente de competencias y potencialidades.
Es evidente que algo no se está haciendo bien cuando a pesar de existir la tasa de paro más elevada que se recuerda, las empresas no son capaces de encontrar perfiles que puedan satisfacer sus carencias.
Coincido con la secretaria general en cuanto al origen del problema. Hoy en día nuestra educación sigue sustentada en pilares demasiados tradicionales, la formación que ofrecen las universidades a menudo es demasiado teórica y aunque con Bolonia se ha intentado corregir, a la vista está que el resultado no ha sido el esperado.
Por poner un ejemplo relativo a nuestro Grado en Derecho, a lo largo de toda la carrera, únicamente he tenido que realizar un examen de forma oral. Aunque en nuestro futuro desempeño, será requisito fundamental tener una buena capacidad de oratoria, lo cierto es que, en nuestro periodo de formación apenas trabajamos este aspecto lo cual nos pone en desventaja competitiva en el mercado. Esto mismo ocurre con el idioma, ese gran desconocido por la universidad de Sevilla y que parece ser que en algún momento se exige.
En definitiva, no me parece mal recibir toda esta formación teórica que dentro de lo que cabe nos proporciona una base que sirve para agilizar nuestro futuro trabajo, pero no se puede olvidar que junto a esta formación, es fundamental desarrollar otros aspectos y valores como la capacidad de expresarnos, la iniciativa y tener conocimiento de otros idiomas en un mundo con tendencia a la globalización.
Todas estas medidas serán fundamentales para combatir el paro y por ende la crisis que atraviesa el país, las empresas encontrarán nuevos ``talentos´´ con más facilidad y además les producirá un ahorro considerable en su formación profesional.