¿Somos los españoles vagos?

Reflexión de José Carlos Pérez Durán

Esta pregunta tiene que ver con la jornada laboral y puede dar lugar a equivocaciones. Para comenzar, apuntaremos a la cultura. En España, quizás por nuestra situación geográfica, por nuestro huso horario, quizás por la legislación que tenemos, tenemos unas costumbres laborales muy diferentes a la del resto de los países europeos. 

En primer lugar, empezaremos paradójicamente por el final del día. De media, los españoles se van a dormir sobre la medianoche, mucho más tarde que un francés o un alemán. Lógicamente, nos levantamos más tarde y utilizamos más tiempo para el desayuno. Estas circunstancias hacen que normalmente la jornada laboral en España comience a las 9 de la mañana, una hora más tarde que en Alemania y 2 horas más tarde que en Suecia, país de la zona Euro que antes comienza su jornada de trabajo. 

Otra diferencia fundamental con los países europeos es la parada para comer. Mientras que en éstos se para durante media hora o una hora como máximo, en España paramos dos horas. Este tiempo es el clave para atajar las diferencias de horarios con los demás países, es evidente que dos horas son demasiadas para comer, y es un tiempo en el que no se puede hacer nada, que se malgasta y que retrasa nuestro fin de la jornada, teniendo mucho menos tiempo para disfrutar de nuestra familia, nuestros amigos o nuestras aficiones.

Todas estas circunstancias crean la opinión de que en España se trabaja poco, que en definitiva somos unos vagos. Si nos fijamos en el gráfico, de media, nuestra jornada laboral se extiende durante 11 horas, por las 9 horas que por promedio duran las jornadas en el resto de Europa. 

¿Somos los españoles vagos? España se trabaja mucho y con mala organización, si optimizáramos más el tiempo borraríamos ese estigma de la opinión pública. A continuación, exponemos un gráfico que compara en qué gastamos el tiempo en España, Italia, Francia, Alemania y Suecia.

Imagen: Diario EL PAÍS
Fuente: Eurostat