REFLEXIÓN PERSONAL
SOBRE LA ÉTICA Y CORRUPCIÓN
He elegido este tema
para hacer la reflexión, porque creo que desgraciadamente es el que toma protagonismo
en las portadas de prensa y en las noticias actuales.
Ética y corrupción, dos
términos contrapuestos, de manera que si se da uno de ellos escasea el otro. En
este caso, sin duda destaca la corrupción e invade a la ética. Como estudiante
de Derecho y GAP, los temas que abordan la mayoría de las asignaturas están
basados en leyes, en normas jurídicas de obligado cumplimiento. Pues bien, al
parecer hoy en día ciertos preceptos pertenecientes a determinadas leyes quedan
en papel mojado, no se cumplen y lo grave es que dicho incumplimiento es
llevado a cabo por políticos, esas personas que supuestamente gobiernan, nos
gobiernan.
En teoría deberían otorgarnos
un servicio público bueno, en el que realmente su prioridad fueran los
ciudadanos y no el hecho de lucrarse en cuanto tienen la mínima oportunidad a
la vista y aprovechándose del cargo al que “representan”. Me gustaría concebir
el término sociedad como un todo compuesto por el conjunto de ciudadanos españoles
y poder incluir en ese saco a todas las personas pertenecientes a la política. Pero
no, la visión que la actualidad me transmite es que se trata de una relación
compuesta por dos polos, nosotros los ciudadanos y por otro lado los políticos, los que el concepto de soberanía popular no lo tienen del todo en cuenta, los que están inmersos en un círculo donde
las informalidades y los intereses florecen, donde la división de poderes bajo
mi punto de vista no es tenida en cuenta en toda su esencia y donde demasiados
ámbitos se encuentran politizados.
Quizás la postura que muestro en la reflexión es muy negativa, porque claro está que no se puede generalizar, sin duda, habrá políticos que desempeñen su trabajo de la mejor forma posible y satisfaciendo nuestras necesidades. Pero ya por el hecho de existir la corrupción, no creo que sea lo más acertado de cara a una sociedad, no crea confianza y no muestra seriedad.
Quizás la postura que muestro en la reflexión es muy negativa, porque claro está que no se puede generalizar, sin duda, habrá políticos que desempeñen su trabajo de la mejor forma posible y satisfaciendo nuestras necesidades. Pero ya por el hecho de existir la corrupción, no creo que sea lo más acertado de cara a una sociedad, no crea confianza y no muestra seriedad.
Creo que hoy en día y refiriéndome a todo un conjunto, se han perdido muchos valores destacando entre
ellos el respeto, éstos están íntimamente relacionados con la ética, y ya que
poco a poco se desvanecen dichos valores básicos al menos que el ámbito
político trate de reforzarlos predicando con el ejemplo.
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