Por Gloria Ruiz Arce:
Andaba un poco indecisa acerca
del tema a tratar en la reflexión personal, pero a raíz de una de las noticias que
he comentado me ha venido a la cabeza un tema que me he planteado muchas veces
y al cual le urge una profunda reforma.
Este tema es el de la situación actual
de los trabajadores, en cuando a satisfacción, motivación y bienestar en sus
puestos de trabajo.
No son pocas las veces que he leído
en el periódico, he visto en las noticias o he escuchado en la radio, las
nuevas formas de trabajar que se están implantado en muchos países (suelen ser
del norte de Europa). Hace poco escuché que en muchas empresas de estos países,
los trabajadores tenían salas con camas para descansar cuando lo necesitaran, o
que los horarios de los mismos no eran unos horarios prefijados, sino unos
horarios flexibles en los que la empresa se preocupaba de que tu vida laboral y
familiar conciliara de la mejor manera posible. Y ahora me pregunto yo, ¿es
probable una forma de trabajo así en España, o nuestra forma de ser hace que el
método más eficaz sea trabajar muchas horas y sin apenas ninguna interrupción?
Es evidente que si nos comparamos
con países como Suiza o Noruega, las similitudes que encontramos en todos los
aspectos son pocas, la forma de trabajar y las condiciones son muy distintas,
como también lo son las personalidades de cada país. Pero hay que plantearse
que los españoles somos unos de los más insatisfechos con su entorno laboral, y
que sin duda, es necesario ver el por qué y atajar el problema.
Si como hemos visto, las
condiciones que en estos países se implantan logran un entorno grato para sus
trabajadores, mi opinión es que, siendo conscientes en todo momento de las
diferencias que nos separan de ellos, se podrían ir implantando medidas
semejantes entre nuestros trabajadores, de forma que poco a poco, estos se
encuentren cómodos para realizar sus tareas.
Y es que, es evidente que, para que una empresa alcance sus objetivos
hay que tener en cuenta que, aspectos como el lugar de trabajo o
los factores sociales tienen un gran impacto sobre el rendimiento.
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